Con capacidad para 200 personas, la reconocida sala de conciertos del barrio porteño del Abasto se maneja desde 2004 de manera cooperativa.
Declarada desde el año pasado como Sitio de interés social y cultural de la ciudad de Buenos Aires por la Legislatura local, habilitó una barra manejada por la propia cooperativa, con extenso catálogo de tragos, vinos y cerveza artesanal, así como pizzas y empanadas caseras.
El CAFF, creado a instancias de la Orquesta Fernández Fierro -banda de tango con espíritu de rock-, también brinda su espacio como sala de ensayo, set de filmaciones y lugar destinado a talleres, encuentros o celebraciones.
Refugio de la cultura argentina independiente, el club posee una programación musical y artística que está a cargo de Walter El Tano Coccaro.
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