Además, este año, Santander contrató a 24 jóvenes para que tengan su primera experiencia y puedan dar los pasos iniciales en el mercado laboral formal.
De esta forma, se incorporarán a los equipos comerciales en sucursales de Buenos Aires, Mendoza, Salta, Corrientes, Santa Fe y CABA.
Los jóvenes que participaron del proceso fueron acompañados por el equipo de Gestión de Talento de Santander, quienes los guiaron y asesoraron sobre las modalidades de selección y las instancias de entrevistas.
Verónica Climent, gerente principal de Gestión y Desarrollo de Personas, Inmuebles, Costos y Seguridad, afirmó que "El objetivo de este proyecto consiste en ayudar a los jóvenes a progresar y a que más allá de recibir la información que brinda el Centro Educativo, puedan establecer un vínculo entre la formación y la puesta en práctica de los contenidos en el mercado laboral real. Creemos que aporta valor y deja a los jóvenes mejor preparados de cara al futuro".
Sobre los participantes que harán una experiencia en el banco, Climent comentó que "Este tipo de actividades es muy importante, ya que tiene una vinculación directa con nuestra misión, que es contribuir al progreso de las personas. Estamos muy contentos de brindar a 24 participantes la posibilidad de hacer una experiencia con nosotros".
Hace más de 10 años que Santander y la Fundación Pescar desarrollan el programa de formación para el empleo. Los centros educativos, que funcionan durante 6 meses dentro de empresas o instituciones, brindan capacitación personal y laboral a jóvenes, en general del último año del secundario.
Este programa forma parte de la estrategia que Santander tiene en términos de inversión en la comunidad y favorece el cumplimiento de uno de sus propósitos: contribuir con el progreso de las personas.
En la actualidad, hay 46 egresados del programa trabajando en Santander. Uno de ellos, incluso, alcanzó el mejor desempeño en calidad de atención de todo el banco.
La convocatoria de los participantes se realiza en escuelas y organizaciones, y los interesados atraviesan un proceso de selección que apunta a jóvenes que se encuentran en una situación de vulnerabilidad socioeconómica, y que demuestran motivación y compromiso por mejorar el presente y el futuro.
Los empleados de Santander ofrecieron tiempo y conocimientos como mentores de la formación de los alumnos. Más allá de darles charlas inspiracionales que aporten experiencias de superación personal.
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