Liquid Guard fue creado en Alemania y aprobado bajo estándares tanto europeos como locales.
El producto mantiene a las superficies sanitizadas por un año, y las libera incluso de los agentes más peligrosos, como superbacterias intrahospitalarias KPC y Staphylococus aureus, Escherichia coli –con más de 99 % de eficacia– y coronavirus.
Esta solución efectiva, versátil y duradera viene a modificar los estándares en bioseguridad en todo tipo de ambientes.
Liquid Guard se aplica con paño directamente sobre la superficie a tratar, a la cual cubre de una película fina e invisible capaz de inactivar los microbios, sin alterar la textura ni ofrecer toxicidad para la salud humana.

En Europa, por ejemplo, fue adoptado por cadenas de hotelería, porque puede aplicarse en colchones, cortinas o almohadas, como así también sobre superficies rígidas.
No funciona por acción química, sino física: es un revestimiento con base de dióxido de silicio diseñado con la más avanzada nanotecnología.
No hay comentarios. :
Publicar un comentario