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Las propuestas se basaron en ideas innovadoras acerca de nuevas formas de implementación, metodologías y productos aplicados a la tecnología, que debían servir para generar un impacto para la reactivación económica de la ciudad de Córdoba durante la pandemia de COVID-19 basadas en dos categorías, Economía Social Urbana y Economía Circular Urbana.
Fueron elegidos sendos ganadores por categoría, que accedieron a capital semilla de $1.125.000 para los primeros y $625.000 para los segundos.
En el rubro Economía Social Urbana de Desafío Córdoba Resiliente, quedaron consagradas las siguientes iniciativas:
- Micro Plantas Socioproductivas (3C), de Lucas Recalde: busca generar empleos sostenibles, construcciones más eficientes, acceso a vivienda e infraestructura de calidad, y reducir residuos plásticos.
- Hilanda, de Verónica Ravarotto: aspira a aumentar la participación de las mujeres en el mercado laboral, fabricando y comercializando productos con un sistema innovador de aglomerado de descartes textiles.
Mientras que, en materia de Economía Circular Urbana de Desafío Córdoba Resiliente, se impusieron estos proyectos:
- Granjas Urbanas Renovables (Poniio e Ifbio), de Mauro Barberis: el objetivo consiste en garantizar la seguridad alimenticia mediante el cultivo de vegetales en áreas urbanas, pero además, dar una solución a la gestión de residuos orgánicos mediante la producción de energía en forma de biogás.
- Mejoras en la planta de madera plástica Mundo Müller (Industrias Elypson), de Francisco Rua: a través de la incorporación de maquinaria y equipamiento, se propone generar un proceso productivo de fabricación de madera plástica, la cual utilizará como materia primera residuos plásticos, dándoles una segunda vida y contribuyendo a la economía circular.
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