
Es vox populi que, durante el invierno, la dermis precisa de una atención especial para evitar deshidratación o roturas, con mayor incidencia en pieles muy secas.
Según la dermocosmiatra Verónica Chapoval, "la manteca se obtiene de la nuez del árbol de Karité, a la que se prensa y se lleva a ebullición para llegar a tener la grasa 100 % pura. Es rica en vitaminas y tiene múltiples beneficios, entre los cuales se destaca su efecto reparador y cicatrizante: recurrían a ella las tribus africanas para curar heridas".
Otro plus: es apta para todo tipo de pieles (no es comedogénica, por ende, no provoca acné ni obstruye los poros).
Posee un alto poder hidrante y emoliente. Por eso, se puede utilizar en dermis secas y deshidratadas, en especial en talones, rodillas, codos y hasta uñas.
Para nutrir dichas zonas, Burt's Bees recomienda su Crema Reparadora de Manos a base de mantequilla de Shea o Karité, una combinación de los más finos extractos de hojas y las vitaminas A y E que ayudan a revitalizar las manos y codos, manteniéndolos en buen estado durante todo el día.
Burt's Bees ofrece su Loción sin Fragancia para el cuerpo a base de mantequilla de Shea o Karité y vitamina E, la cual ayuda a la reducción de las arrugas, mejora la elasticidad de la piel y la protege contra el envejecimiento a causa del medio ambiente.
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