Surgió hace un par de años en los Estados Unidos con el objetivo de cubrir cicatrices y marcas derivadas de enfermedades de la vista y hoy; son muchos los que lo eligen para conseguir una estética alternativa.
Este tipo de tatuaje conlleva un procedimiento en general simple, pero que requiere de extremo cuidado ya que la esclera –la parte blanca del ojo- es una capa muy delgada y puede provocar grandes lesiones en la visión en algunos casos irreversibles. Muchas personas se pintan pequeñas formas en los ojos y otras tantas se tiñen en profundidad la esclera.
El doctor Robert A. Kaufer, director médico de la Clínica de Ojos Kaufer, advirtió sobre los peligros de someterse a estos tratamientos, ya que pueden llevar a la ceguera y a generar reacciones adversas severas, como infecciones muy difíciles de tratar, hemorragias o perforaciones oculares. Asimismo, subrayó que muchas veces el color del ojo refleja una enfermedad y al estar teñido, se hace difícil examinarlo y detectar a tiempo la afección.
Por otra parte, la implantación de bijouterie ocular (jewelEye) consiste en la colocación de pequeñas joyas por debajo de la conjuntiva, es decir la membrana transparente y delgada que cubre la superficie ocular. También se pueden implantar en la cornea para ocultar cicatrices (leucomas).
Estas joyas están hechas de titanio y tienen un tamaño no mayor a 3mm. de espesor y existen diferentes formas.
En un procedimiento rápido, de no más de 15 minutos en manos de personas no expertas, puede generar numerosas complicaciones.Además de las molestias permanentes que este procedimiento puede causar, quienes se someten a esta esta peligrosa practica pueden sufrir desde una simple conjuntivitis, hasta una infección severa, sangrados subconjuntivales, la perforación del globo ocular o, incluso, la perdida total del ojo con ceguera permanente.
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