La sociedad de la nieve, de Pablo Vierci, se convirtió, sin duda, en uno de los grandes libros de la temporada 2008/9. Además de haber reunido por primera vez el testimonio de los 16 sobrevivientes de la tragedia aérea de los Andes -lo cual no es un mérito menor-, logró concebir una obra muy bien escrita, atrapante, humana, inspiradora y emotiva, sin caer en golpes bajos o sensacionalismos.
Vierci, que compartió 10 años de escuela primaria y secundaria con la mayoría de los protagonistas de esta conmocionante historia (muchos de los cuales perecieron en las montañas en 1972), sintetizó en las primeras páginas cómo consiguió que todos los que salieron con vida del dramático accidente, incluso quienes guardaron absoluto silencio desde hace 34 años, accedieran a participar.
Con precisión narrativa, el autor intercala el relato -por momentos escalofriante, tenso, conmovedor- de la historia, desde los preparativos del vuelo hasta la actualidad de los supervivientes, pasando por la lucha cotidiana tras la caída del Fairchild 571, con capítulos en los que cada uno de los hombres que regresaron de la muerte reflexionan y evocan en perspectiva -ya son adultos- sobre qué les dejó semejante experiencia siendo veinteañeros: vale la pena repasar muchas de esas frases cargadas de enseñanzas.
Lo superlativo del libro, sin duda, reside en cómo Vierci refleja las palabras de Roberto Canessa, Coche Inciarte, Daniel Fernández, Adolfo Strauch, Moncho Sabella, Alvaro Mangino, Gustavo Zerbino, Javier Methol, Pedro Algorta, Carlitos Páez, Roy Harley, Bobby Francois, Tintín Vizintín, Pancho Delgado, Eduardo Strauch y Nando Parrado, sin perder la objetividad a pesar del innegable pasado que une al escritor con los ex rugbiers uruguayos.
Entre tanta chatura y mediocridad "literaria" -ejemplares que se expenden como hamburguesas-, y gurúes de la "autoayuda" que son best-sellers, La sociedad de la nieve merece ser leído con entusiasmo y sin prejuicios, ya que resulta un verdadero ejemplo de que el hombre puede sobreponerse, si se lo propone -con fe, esfuerzo, solidaridad y voluntad (algo que suele escasear en el llano)-, a la peor de las pesadillas por más real que sea. Y que el texto que la recrea, por si fuera poco, puede estar escrito, como lo hizo Vierci, en forma magnífica.
Marcelo Mendieta
Más información en www.lasociedaddelanieve.com.uy (de donde está tomada la imagen que ilustra este post).
N. de R.: Gracias a Daniel Balmaceda por su acertada recomendación y a editorial Sudamericana por publicarlo.
Qué bueno!! Voy a leer el libro.
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