En ese sentido, 90 % de las víctimas, que sufren un paro cardíaco fuera de sanatorio, muere principalmente porque la asistencia no llega a tiempo o porque no tiene acceso a un Desfibrilador Externo Automático (DEA).
Philips Argentina, compañía líder en tecnología de la salud, donó un DEA a la Fundación Baccigalupo y a la Asociación Civil Pequeños Pasos para poder proteger la vida de quienes asisten y participan día a día.
Además, Philips brindó un taller de RCP y uso de DEA a sus líderes a fin de estén preparados para poder salvar una vida ante un caso de paro cardíaco súbito, bajo la premisa de que puede ocurrirle a cualquier persona en cualquier lugar y a cualquier edad: sucede de manera inesperada, la víctima deja de respirar y su corazón deja de latir.
En estos casos, la muerte es inminente. La Reanimación Cardio Pulmonar (RCP) es muy importante, pero por sí sola no hará que el corazón vuelva a latir.
Para restituir el latido, se necesita la descarga de un Desfibrilador Externo Automático y el tiempo resulta determinante.
Idealmente, se debe administrar la descarga del DEA dentro de los 3 o 5 minutos de ocurrido el paro.
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