Couture Democracy agrupa a marcas de moda con prácticas ecológicas y responsabilidad social

Impulsado por dos jóvenes emprendedores, Couture Democracy es una plataforma de intercambio y trabajo conjunto, que busca generar conciencia, educación y cambios que lleven a un impacto social positivo en la industria de la moda. 

"Queremos empezar a generar una transformación en las marcas y el consumidor para lograr que la moda mantenga sus estándares de alta calidad y diseño, y además sea más sana con las personas y el medio ambiente. Hoy, el consumidor global está atento, evalúa y elige. Buscamos que ese camino sustentable empiece a recorrerse también aquí", explicaron sus portavoces.

Couture Democracy nació como una idea de dos personas que se definen como consumidores exigentes. 

Vanina Chiappino es apasionada por la moda como forma de expresión, experta en tecnología y negocios internacionales; dejó su empleo en Google para empezar este proyecto. El economista Santiago Bouquet Roldán trabaja en finanzas internacionales y orienta proyectos a alcanzar fines filantrópicos.

"Después del negocio del petróleo, la moda es la industria que más daños produce al medio ambiente. Pero no solo eso, también el trato a las personas que trabajan en la industria no suele ser bueno (se registran horarios muy extensos, mala remuneración y espacios inhumanos). Asimismo, se utilizan pocos materiales locales, se consume mucha agua para hacer jeans o se utilizan tinturas dañinas, y no se tiene en cuenta la huella de carbono, que es el impacto ecológico que produce traer cosas, por ejemplo, desde China", describieron el escenario actual.

"Formar parte de Couture Democracy significa sumarse a un movimiento que revoluciona la industria de la moda para que evolucione. Conocimos a muchas personas del rubro y expertos en sustentabilidad con las mismas preocupaciones y ganas de hacer algo. Nos unen los mismo objetivos. Por eso, la idea de grupo en movimiento", aseguraron.

¿Cómo ser parte de Couture Democracy?

Las marcas de moda de autor y etiquetas enfocadas en el público ABC1 que reciben el sello -de manera gratuita- asumen un compromiso con las prácticas sustentables.

Las marcas que ya las cumplen -reciclaje, uso de tejidos orgánicos, trabajo digno y cuidado de los animales, entre otras- pueden ser parte de Couture Democracy, con el compromiso de seguir realizando esas acciones.

"De esta forma, se empieza a plantar una semilla de responsabilidad. A partir de allí, las empresas pueden seguir incorporando más prácticas sustentables y los consumidores pueden empezar a comprar productos más saludables, de buena calidad y diseño. Para muchos, es el comienzo de un camino más sano que ayudamos a transitar", sostuvieron.

Cada año, se realiza un evento o desfile de todas las colecciones cápsula de los miembros de Couture Democracy para lograr visibilidad ante el consumidor.

En el mundo hay algunas iniciativas que siguen esta línea: Eco Age, creada por Livia Firth -emblema de la moda eco-, es una consultora que trabaja para que con marcas de autor y de lujo realicen acciones sustentables; entre sus clientes figuran Chopard, Stella McCartney, Gucci y Net-a-Porter, entre otras.

Positive Luxury, por su parte, entrega un sello de calidad a empresas que forman parte de la plataforma y aprueban los tests para comprobar que su empresa es sustentable desde la base; ese sello lo llevan, por ejemplo, Kenzo, Loewe y Dior.

"Ambas apuntan a generar cambios y realizar iniciativas que tengan impacto positivo pero no buscan crear una comunidad. Couture Democracy cree que en conjunto podemos tener un impacto mucho más fuerte que de manera individual", señalaron.

Couture Democracy cuenta con siete marcas en su comunidad y otras tantas en proceso de admisión. Las empresas que ya tienen su sello de sustentabilidad son Leaf Eco Shoes, Animaná, NOD, Bastardo, Cubreme , Made in Chola, Abre y Vernna.

"Decidieron sumarse porque creen que el futuro de la moda no se trata solo de hablar de la paleta de colores. La moda está cambiando: ya no es algo frívolo sino que busca transmitir un mensaje a través del diseño y el consumo responsable", aseveraron.

Chiappino y Bouquet Roldán confían en la potencia que el colectivo puede lograr: "Lo importante, para que el accionar tenga efecto, es hacerlo en grupo, animarse a innovar y escuchar al consumidor. Nuestra principal misión consiste en realizar iniciativas concretas que tengan un impacto positivo y sumar gente que comparta nuestra visión", concluyeron.