Tenemos un problema, Ernesto lleva el humor hasta los límites del absurdo (¿será película de culto?)

Tenemos un problema, Ernesto parece destinada a convertirse en una película de culto, aunque tenga asegurado un prometedor estreno el 30 de octubre en Hoyts, Cinemark y Cinemacenter, entre otras salas argentinas, incluido -como resulta previsible- el cine porteño Gaumont.

El autor, director y protagonista, Diego Recalde, lleva el humor hasta los límites de lo absurdo y lo bizarro, alrededor de Ernesto Ramponi, un personaje que, de repente, se da cuenta de que perdió el pene (?!).

A partir de esa insólita y confusa situación, se extiende una desopilante pesadilla de casi 90 minutos, una carrera para tratar de recuperar el miembro extraviado y descubrir qué fue lo que sucedió, quién se adueñó de él: ¿seres extraterrestres, otra persona...? 

Y cómo se produjo semejante fenómeno: ¿hubo abducción, hechicería, magia negra?

Desfilan, entonces, una serie de hilarantes especialistas en ciencias ocultas y legales (médicos y hasta un psicólogo), que solo generan más confusión en el pobre, solitario y desconsolado Ernesto, inmerso en un virtual road movie, pero de a pie.

Con mirada socarrona, aprovecha para mofarse de los programas que ofrecen falsas soluciones -sean manochantas "naturales" o con diplomas de dudosa procedencia-, y los realities que copan la televisión.

Se destacan los trabajos de la bella y talentosa Paula Kohan y el siempre efectivo y dúctil Ernesto Claudio. La participación especial de Erika Wallner enaltece el cartel y las colaboraciones de Cabito y Pablo Fábregas sumarán público joven.

Al estilo de Woody Allen, el protagonista está inspirado en su creador (o este deposita conflictos y aspectos propios en el personaje), al menos, en cuanto a la profesión: ambos son guionistas.

Recalde ha trabajado en TV con Mario Pergolini, Roberto Pettinato, Andy Kusnetzoff, Mariana Fabbiani, Humberto Tortonese, Martín Ciccioli, Sebastián Borensztein, Marcelo Tinelli, Alejandro Fantino y Diego Ripoll.

Se ignora si el autor también extravió alguna vez su falo, aunque es probable que haya padecido una fantasía de castración. Por suerte, no se quedó con las ganas de llevar su novela homónima, publicada en 2010 por Planeta, a la pantalla grande.

Sin grandes pretensiones, Tenemos un problema, Ernesto entretiene, divierte y despierta carcajadas.

En esta misma página, se puede reproducir el trailer de la película.