Emprender un viaje de turismo en un crucero debe ser siempre una actividad placentera, desde el momento mismo de decidir viajar hasta el regreso a casa.
Para contribuir a ese fin, conviene tener en cuenta algunas sugerencias y comentarios que, sin dudas, contribuirán a que tener el mejor recuerdo del periplo.
En cuanto al equipaje:
. No llevar prendas demás, porque eso implicará más piezas de equipaje y por consiguiente más elementos de los cuales ocuparse.
. Cerrar las valijas con candados y personalizarlas con etiquetas o cintas de color, de manera de identificarlo con mayor facilidad.
Se recomienda que la llegada a la terminal sea en taxi, porque no hay lugar de estacionamiento destinado a alojar a vehículos de pasajeros.
El momento del descenso del auto y el desplazamiento de cientos de personas genera un ambiente propicio para los oportunistas, quienes estarán muy atentos a cualquier descuido para actuar en provecho propio.
Al descargar el equipaje, se debe mantener siempre la vista sobre él. Cuidar muy especialmente el equipaje de mano (es el más liviano y manejable). No aceptar gentiles colaboraciones para transportar las valijas.
Al despachar el equipaje y en el preembarque:
. Asegurarse de que las valijas sean recibidas por el personal de la terminal en el lugar de entrega. Guardar en lugar seguro los recibos del equipaje (luego le serán requeridos para identificarlo).
. Tener a mano, y a buen recaudo, lo que se conoce como las 3 P, pasaporte, pasaje y plata (dinero).
En el sector de espera, habrá grupos numerosos de personas con espíritu festivo y descontracturado. Hay que disfrutar, pero mantener la atención sobre los efectos personales (bolso de mano, cámara fotográfica, documentación, etcétera).
Por último, se sugiere mantener en la mayor reserva posible toda información sobre el viaje.
N.de R.: este texto y la foto han sido tomados del blog de Securitas Argentina, InfoZonaSegura.com.
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