La Fundación Pro Tejer desmintió versiones periodísticas sobre la eventual falta de productos textiles para abastecer al mercado interno.
Por el contrario, el titular de la entidad, Pedro Bergaglio (foto), apuntó que "existe una capacidad ociosa de
la cadena de valor de la agro industria textil y de indumentaria de 30%, así como importantes stocks de mercaderías. En consecuencia, la producción nacional, ante estímulos de la demanda, está en condiciones de aprovisionar con rapidez al mercado", concluyó.
"Desafortunadamente -agregó Bergaglio-, a pesar de la paulatina reactivación del mercado interno de los últimos dos meses, el nivel de actividad en lo que va del año se mantiene alrededor de 15% por debajo del mismo período del año pasado".
"En este contexto, sería paradójico creer que podría producirse un desabastecimiento cuando el nivel de actividad y las ventas son inferiores que las del año pasado", señaló el presidente de Pro Tejer.
Desde San Pablo, Brasil, adonde la fundación envió una misión de 10 empresarios y funcionarios textiles para acompañar al gobierno nacional en las negociaciones comerciales entre la Argentina y el país anfitrión, Bergaglio sostuvo que "la efectividad de las licencias no automáticas de importación aplicadas a la industria textil y de indumentaria para controlar las operaciones de importación en condiciones desleales ha sido notable, porque ha permitido el mantenimiento de los 460 mil puestos de trabajo directos generados por la cadena de valor".
"Los importadores textiles, orientados por los funcionarios del Ministerio de la Producción, están realizando un proceso de sustitución de las compras externas por aprovisionamiento local, lo cual ha permitido sostener en alguna medida los niveles de actividad del sector; en efecto, las compras externas, medidas en kilogramos, han bajado 44,8% en los primeros 5 meses de este año respecto al mismo lapso del año
anterior", precisó.
Por su parte, el empresario textil Víctor Hugo Benyakar, titular de la Cámara Argentina de la Indumentaria de Bebés y Niños (CAIBYN), aseguró, en el marco de la misma reunión bilateral, que “ambas naciones entendimos que no somos una amenaza entre nosotros: la verdadera amenaza para la Argentina y Brasil es China”.
“Para defender nuestras industrias tenemos que trabajar en conjunto con Brasil para frenar la importación de Asia y de cualquier país con precios que nos dañen”, advirtió Benyakar.
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