
Esta iniciativa se sumó al Programa de Recolección y Reciclado de Baterías, que ya superó 1.600.000 unidades desde diciembre de 1999.
Carcazas, cargadores, cables y otros periféricos son triturados y reutilizados por firmas que usan el scrap de plásticos, chatarra de metales y el vidrio como insumos de nuevos procesos industriales.
A su vez, los circuitos impresos e integrados y los transistores son exportados por Silkers a la firma Arc Metal AB, de Suecia, donde se refinan y recuperan materias

En el caso de las baterías, la parte plástica se condensa en vapor, se vitrifica, y lo que se obtiene es reutilizado, por ejemplo, en asfalto.
Las partes metálicas, níquel y cadmio, se recuperan a través de un horno de fusión y se obtienen lingotes de cadmio y de níquel ferroso, empleados -por caso- en las industria automotriz.
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